Si Carlos Casazza no existiera, habría que inventarlo. Excelente guitarrista y compositor (algo que puede comprobarse por el simple trámite de escuchar sus discos o La palabra kilómetros, el álbum que grabó con Ernesto Jodos), gran formador de músicos y, aunque pocos lo sepan, un muy inteligente gestor cultura, es, según propia definición, "un producto del hockey sobre césped", lo que se explica sabiendo que sus padres se conocieron jugando a ese deporte en Venado Tuerto. Los que siguen son los discos que más le interesaron en 2011.
Elijo Vueltas de Francisco Lovuolo, editado por PAI .
También, A child is born, de Carlos Lastra, editado por Rivorecords. Fue un año de excelentes discos nacionales, si vale el epíteto. Lirismo, presión, ocurrencia, experiencia. Podemos combinar esos adjetivos de diversa manera con estos diversos trabajos.
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